miércoles, 17 de agosto de 2011

Infelicidad y Éxito

   Vuestros cuerpos pueden parecer jóvenes, pero vuestros viejos pensamientos delatan vuestra ruina. Nacéis bajo la protección familiar y sois educados para lograr ser los mejores, la élite. Crecéis arropados por los brazos de vuestros padres. Sois pasto de una jerarquía, veis el papel verde estampado en cada una de vuestras acciones. Erráis en cada una de vuestras decisiones, vivís rodeados de falsos actores que escriben sus propios guiones, el ser humano nunca es verdadero, muestra lo que quiere que la gente vea. Muestra el éxito, pero ¿qué es el éxito profesional?. ¿El éxito profesional es superar al resto de los mortales?, ¿es ser superior y restregar tu éxito por la cara a la gente?. Es un invento de las marcas, del siglo XX. Estudia, obedece a tus padres, lo veo justo, te dan la vida, eso se debe pagar de algún modo, pero no eternamente. Termina tus estudios, trabaja, compra una casa, busca una pareja, trabaja, compra un coche, trabaja, compra, trabaja, compra una casa en el campo, trabaja, compra un coche mejor, trabaja, ten hijos, trabaja, educa a tus hijos, gana dinero, gasta dinero, jubílate, muere. Ese es el ciclo lineal de la vida. No quiero ser así, quiero vivir aventuras, explorar el mundo, visitar cada rincón del universo, quiero culturizarme, quiero vivir experiencias, el espíritu del hombre se alimenta de nuevas experiencias, no quiero vivir como tú, quiero ser un fracasado, quiero ser un fracasado feliz. Claro que quiero ganar dinero, pero no lo pondré a disposición de bancos y cajas, me lo gastaré todo, quiero exprimir hasta el último céntimo que tenga, aunque tenga que vivir debajo de un puente durante alguna temporada.


Todos somos víctimas de todos, el infinito pez que se muerde la cola. 
Todos menos yo, claro está...

lunes, 15 de agosto de 2011

Maniquíes Masculinos

  Anda, pero vigila bien donde pisas, la tierra ahora está demasiado removida. Camina, intenta pisotearlo todo y destruir todo lo que se te antoje. Pero ten cuidado de no posar tus pies sobre la baldosa equivocada o puede que todo, absolutamente todo te caiga encima. El hombre siempre intenta evitar en sus seres queridos su propia debilidad.

Te quiero pero necesito el sabor de otra polla.


miércoles, 10 de agosto de 2011

Mientras tanto en mi cabeza...

   Bueno, aquí estoy frente al ordenador, como viene siendo habitual durante estas noches de verano y como viene siendo molestamente habitual, sin nada que escribir y con mil ideas rondando la cabeza. Todas girando, algunas incluso a contracorriente, necesito que se estanquen y que fermenten. Todo gira alrededor del mismo punto, todo el universo, desde las colosales estrellas hasta los más pequeños asteroides. Ahora a solas, más que nunca puedo pensar y reflexionar sobre todo, lo quiero. Entre mi enfermedad puedo verla, ver la cura. No es nada afable el saber que algún día el universo será un completo caos, ya he vivido así, no quiero volver a probarlo. He puesto todo mi alma y empeño en seguir adelante, me he sacrificado cada segundo, maldita sea, quiero ser feliz. Quiero tener la vida que deseo, quiero tener esa vida al completo, contigo. Quiero que me necesites y que sepas que te necesito, ya no sé cómo demostrártelo (bueno, si que lo sé, pero en España es ilegal). Hoy quiero soñar y despertar en una habitación de hotel, necesito que estés ahí, durmiendo, necesito que si lees esto, tú también lo imagines, necesito abrir las cortinas y que la luz del Sol me queme las retinas. Necesito ver algo que nunca haya visto, una ciudad nueva para mi, un horizonte al que caminar, una montaña que escalar. Necesito romper el cristal de la ventana, necesito ver mis puños sangrar, necesito saltar al vacío y reventarme los sesos contra el asfalto. Quiero ser un niño muerto.